Los grandes problemas de las redes sociales

Hoy día es raro que alguien no cuente con redes sociales. Normalmente al hacer amigos, lo primero que les preguntamos es por su cuenta de instagram, twitter, snapchat o facebook.  

Lo curioso es que estas son las redes sociales peor valoradas por el impacto que tienen en los más jóvenes pues han llegado a producir trastornos como depresión, ansiedad, soledad o problemas de sueño. 

Otros peligros que derivan del uso excesivo de las redes sociales son la falta de capacidad de atención y retención, falta de separación entre vida real y social, problemas de ansiedad y baja autoestima. Estos son parte de aquellos factores los cuales provocan que el individuo se pierda a sí mismo, sumiendose en sus inseguridades y comparándose con las versiones modificadas que otros proyectan de sí mismos en estas redes. 

Esto nos lleva a la introducción de un nuevo término; «nomofobia´´, derivado de no mobile phone phobia, en inglés, miedo a no disponer del teléfono móvil. La nomofobia es un término novedoso que consiste en, como ya he mencionado, tener un miedo irracional a no poder usar el teléfono móvil, ya sea por no llevarlo con nosotros o por tenerlo fuera de cobertura o batería.  

Como otras fobias, la nomofobia se manifiesta a través de síntomas comunes como el miedo, el nerviosismo o la angustia, pero también con otros como taquicardias, dolor de cabeza, dolor de estómago o pensamientos obsesivos. Las causas de la nomofobia suelen ser bastante evidentes y para tratarla se suele recurrir a psicoterapias cognitivo-conductual. 

En conclusión, el teléfono móvil puede transformarse en una adicción difícil de controlar y provocar un alejamiento de la vida real que hay que evitar. 

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